Un Lockheed Galaxy como los apostados en la base aeronaval de Rota (Cádiz), en ruta entre los Estados Unidos y las bases aliadas en Arabia Saudí durante la Primera Guerra del Golfo (1991).
En enero de 1991, el Ministerio del Interior dictó instrucciones a la policía para que extremaran la vigilancia en todas las bases norteamericanas en suelo español, “ante el presumible riesgo de acciones violentas contra las mismas por parte de terroristas árabes, así como de acciones de otro carácter por parte de grupos pacifistas”. En aquellos días las bases de la fuerza aérea y la marina de los Estados Unidos en España eran un hervidero. Decenas de Galaxy aterrizaban y despegaban de Torrejón todos los días, convoyes de camiones salían de Rota y la actividad en Morón era intensa (1). Pocos días después, ya estaba claro que España era el gran portaaviones de las fuerzas de la Coalición en el Golfo. El 4 de febrero se informó de una auténtica batalla campal en las puertas de Torrejón entre los manifestantes anti-guerra y las fuerzas del orden.
(1) ABC, 15 de enero de 1991