Las fuerzas de la Wehrmacht de la segunda guerra mundial utilizaron a veces Pervitin, un tipo de metanfetamina, como estimulante militar. En la guerra civil española se utilizaba un producto más tradicional, que había que proporcionar tanto a militares como a civiles, lo que causó graves problemas de salud pública, sobre todo en la zona republicana, por la escasez de suministro y la consiguiente adulteración del producto. La zona nacional estaba mejor abastecida y politizó desde el principio las bebidas alcohólicas, además de asegurar un suministro abundante para la tropa.
El Pensamiento Alavés, 1 de abril de 1937
Mundo Gráfico, 21 de abril de 1937
Azul (Córdoba), 19 de mayo de 1937
Azul (Córdoba), 7 de enero de 1938
¿Qué va usted a tomar? La copa del misterio ante el heroico consumidor (La adulteración de bebidas en los bares de Madrid) Crónica, 16 de enero de 1938
Azul (Córdoba), 10 de noviembre de 1938
Asuntos: Alcohol
Tochos: La guerra total en España