Una ceremonia clásica del franquismo: el Caudillo en persona aprieta el botón que llenará de trigo un silo, pondrá en marcha una central eléctrica o –como en este caso– inaugurará un embalse. Aunque en este caso se trató probablemente de un viaje ad hoc, normalmente estas ceremonias de magia autoritaria se hacían en el curso de viajes por las provincias en «la serpiente de charol», la caravana de coches oficiales pintados de negro.
De las Memorias de D. Laureano López Rodó
Asuntos: Ceremonias, Dictador
Tochos: El museo del franquismo