Uno de los tres prototipos construidos del Messerschmitt Me-264.
Este avión de casi 60 toneladas a plena carga y muy larga autonomía se diseñó como patrullero marítimo para el Atlántico Norte, como apoyo aéreo del despliegue de los submarinos que atacaban la ruta marítima troncal que unía las fábricas de Estados Unidos con Gran Bretaña. También participó en el proyecto de bombardero de Nueva York, una de las obsesiones del nazismo en guerra. Tenía aproximadamente el mismo tamaño y peso que el Boeing B-29, el bombardero de Hiroshima, y tal vez más autonomía, pero mientras que el complejo militar-industrial norteamericano fue capaz de fabricar casi 4.000 unidades de la Superfortaleza volante, su homólogo alemán apenas pudo fabricar 3 prototipos. El avión voló por primera vez a finales de 1942 y mediados de 1944, con la derrota cercana, el proyecto fue cancelado.
Ecosistemas: 1939-1945 Segunda Guerra Mundial