Un grupo de militares franceses rodean un avión alemán que aterrizó en Calais el 6 de septiembre de 1915, seguramente un Aviatik B.II de reconocimiento. La posición del avión entre árboles y zarzas la hacen parecer literalmente caído del cielo, pero sin un rasguño. Calais estaba a unos 80 km del frente, que no se movió apenas hasta el verano de 1918 y discurría de norte a sur desde la costa en Nieuport hasta Noyon, no muy lejos de París, pasando por los lugares donde tuvieron lugar las maníacas ofensivas de 1915, 1916 y 1917 en lugares como Ypres, Neuve Chapelle, Loos, Vimy, Arras y tantos otros. El otoño de 1915 fue el del azote del Fokker, cuando los cazas alemanes diseñados exprofeso como aviones de combate barrieron del cielo a los aparatos de reconocimiento aliados. Algunos días después de la caída del Aviatik comenzó la ofensiva francobritánica de Champagne / Loos, que fue detenida por las fuerzas alemanas y causó en total unas 150.000 bajas.
Hallado en Gallica
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